São Vicente

El municipio de São Vicente alberga una vasta área de Laurisilva, considerada el tesoro natural más valioso del archipiélago. La diversidad de flora y fauna de este bosque, combinada con su excelente estado de conservación, hace de São Vicente uno de los mejores lugares para explorar la naturaleza madeirense a través de sus variados senderos peatonales, a menudo con el océano como telón de fondo.

 

El paisaje verde de esta región también está moldeado por la acción de las fuerzas volcánicas y la erosión de sus laderas. Aquí se pueden visitar las famosas cuevas volcánicas, formadas hace unos 890.000 años, que ofrecen un impresionante testimonio de la historia geológica de la isla. Con tantos atractivos, el municipio de São Vicente merece ser descubierto.

 

Otro punto de interés llamativo es la capilla de São Vicente, también conocida como la capilla de Calhau. Esta pequeña y peculiar capilla fue construida dentro de una roca basáltica junto al mar, simbolizando la profunda conexión de la región con la fe y la omnipresente roca volcánica.

 

Actualmente, el municipio de São Vicente alberga a unos 6000 habitantes, repartidos en tres parroquias: Boaventura, Ponta Delgada y São Vicente. Con una superficie total de 78,70 km², esta región está dominada por exuberantes paisajes, donde predomina el bosque.